El silencio a veces dice más que mil palabras.
El tiempo no se recupera, por eso úsalo sabiamente.
De cada error se aprende, si tienes la humildad de aceptarlo.
Perdonar no cambia el pasado, pero sí alivia el alma.
Las decisiones que tomas hoy construyen tu mañana.
Mirar hacia adentro es el primer paso para avanzar con claridad.
La paciencia no es esperar, es saber actuar en el momento justo.
La conciencia tranquila es el mejor descanso por las noches.
A veces perder el rumbo es la forma de encontrar un nuevo camino.
La verdadera riqueza no está en lo que tienes, sino en lo que eres.
No puedes controlar todo lo que pasa, pero sí cómo respondes a ello.